Ir a buscar a tu perro adoptado

La ilusión del momento al ir a buscar a tu perro adoptado es indescriptible, tienes todos tus sentidos puestos en ir a buscarle, así que nada saldrá mal si estás preparado:

Organiza el viaje de ida y de vuelta

Es mejor que te acompañe alguien sobre todo si vas en coche porque te ayudará a poder prestarle atención durante el trayecto sin que nadie corra riesgos.

Tener el apoyo de alguien siempre es bueno y si tienes más perros podrá ir a por ellos y hacer las presentaciones durante vuestro primer paseo.

Acondiciona el coche

Recuerda que tenéis que cumplir todas las medidas de seguridad.

Si va atado en el asiento de atrás, es aconsejable cubrir los asientos con una manta impermeable y no te olvides del enganche al cinturón homologado.

Si además has optado por la valla de separación asegúrate que está bien sujeta.

Ten bien sujeto y preparado el transportin con una base blanda e impermeable (puede ser un cojín o manta), si esa es tu opción.

Es aconsejable cubrir con parasoles las ventanas para evitar mareos y demasiados estímulos.

No poner la radio o ponerla muy bajita.

Asegúrate que la temperatura es adecuada, si hace falta pon el aire acondicionado, intenta evitar la calefacción a no ser que haga mucho frío.

Conduce suave.

Si vas andando

No recomiendamos ir andando a no ser que sea un trayecto muy corto.

Si no tienes más remedio asegúrate que el arnés queda bien sujeto y la correa bien agarrada para evitar posibles escapes ante un susto.

Busca una hora tranquila para que haya la mayor paz y los menores estímulos durante el trayecto.

No le metas prisa, deja que huela y lleva premios para ir reforzando positivamente vuestro primer paseo.

Lleva toda la documentación necesaria

En caso de ir a buscarlo a un refugio o perrera, y asegúrate que te dan toda la documentación del perro (cartilla sanitaria, carnet del registro, copia del contrato de pre-adopción…)

Lleva todo lo que el perro va a necesitar

• Arnés
• Correa
• Collar con placa identificativa (con nombre y teléfono)
• Bolsas para recoger excrementos
• Toallitas húmedas
• Premios de varios tipos. El Frankfurt suele ser de los mejores en esta situación porque es blando, fácil de comer y huele mucho.

Ves con mucho tiempo

Que no tengas que hacer nada después, este día va a estar dedicado a tu nuevo amigo.

Respeta su ritmo y espacio

Al subir al coche pide ayuda a los cuidadores para que le sea más fácil. Premia cualquier avance que realice para darle seguridad.

Durante el trayecto obsérvalo, no estés todo el rato encima de él, no le agobies, si es la primera vez que va en coche puede estar muy inquieto.

Recuerda el lenguaje canino, si detectas señales extremas de estrés como salivación excesiva, vómitos, lloros, ladridos, deberás parar inmediatamente.

Deja que el perro se recupere y que huela todo lo que quiera si lo desea, puedes ofrecerle agua. Pasado un rato vuelve a intentarlo o si es posible acaba el trayecto a pie.